Amor a la romana

Hace buen tiempo que no hablo con mi amigo Carlo. Al menos le envío mails para saber cómo está. Carlo vive en Roma y debe estar saltando en un pie. Estudió Literatura en Milán, pero eso no le quita su pasión fubtbolera como la mía, que no jugamos pero igual gozamos, al menos en el caso de copas de la Fifa, y no en cosas como los partidos de Alianza con Cristal. Además, ¿quién no se emociona con un mundial de fútbol? Imagínate la piazza Spagna, repleta de gente paseando por todos lados sin pérdida…. es que mira Italia ganó el mundial y la verdad que me parece aluciante. Roma… roma… ganaste .. mira tú qué hermosa eres y ahora te adornarán con una copa dorada y preciosa. La piazza Navonna además de centro para ver a pintores y comer heladitos…¿cómo estárá? Y las noches, llenas de lindas italianas. Carlo!!!! Qué buena vida, ¡Quién como tú que vives en Roma! Pero bueno, y también los que están de paseo. Luego, Miluska me comenta que está en Firenze, otra belleza de ciudad. Cuando pienso en Florencia me imagino las joyerías del puento viejo y muuuchos, muchos montesitos verdes y bonitos que evocan al David de Miguel Ángel. Pero ella ya llegará a la magia de Roma y uuffff.. qué buena vida, la pasará extraordinario. Es que tanta gente! Tantos mundos. Sólo bastaba caminar por la fermata Ottaviano del metro y se acabó, todo un sueño. Coqueteos y alegría. Un día de ilusión risueña y Una noche romántica y juguetona. Justo la linda Antonella. Ella me contaba que se iba a Italia y yo le dije; caminando por la calle te regalarán una rosa, vas  a ver. Dulce Antonella, q ha vivido la magia romana. Y yo, bueno, tiré mi monedita en la Fontana de Trevi, y como dice la tradición, quien lo hace, regresa. ¡¡Italia, quiero volver a verte!!!!!!

Photo (Milano)

Que la noche italiana me acoja en medio de miradas cosmopolitas, miradas coquetas y chicas de mundo. De arte, de museos emocionantes, de violines por las calles, de amor, de agarres a monton en plena calles, de suspiros espirituales, de coros celestiales, de ricas pasta, y claro, como me dijo Gonzalo al estar en Italia: «No te olvides de comer prosciutto», y por supuesto que lo hice.

Photo Photo PhotoPhoto PhotoPhoto Photo PhotoPhoto PhotoHasta el tío Bill goza viendo el partido Photo

Así ahora no esté por allá, esta es una Muestra símbolica de mi  alegría el triunfo de  Italia
(en los Museos Vaticanos, Roma.)

Esta entrada fue publicada en Libre keyBoard. Guarda el enlace permanente.

Deja un comentario